viernes, 1 de mayo de 2015

Buen verano para la Concha, malo para Ondarreta


Vuelven a aparecer piedras en la playa de Ondarreta


Fecha edición vídeo en Web: 17 de abril de 2015.


Buen verano para la Concha, malo para Ondarreta


Fecha edición impresa del artículo: 24 de abril de 2015 (pág. 14-15).

Fecha edición en Web del artículo: 1 de mayo de 2015.


Críticas constructivas a las conclusiones del estudio de Azti:

"El resultado es que en abril se han aparecido las molestas piedras en el arenal del Antiguo, algo que no se vio el año pasado hasta casi comenzado el verano."

Desde 2012 los movimientos de arena se realizaban todos los años en mayo, anticipándose en unos pocos días al comienzo de la temporada de verano. En 2015 los primeros movimientos de arena se han realizado a finales de enero, probablemente anticipándose al fracaso en la gestión que puede suponer su reaparición ante las próximas elecciones municipales.

Foto 1 y 2. Movimientos de arena a finales de enero (Diario Vasco, 28-01-2015).

Siempre hay que tener en cuenta que el tipo de oleaje y las corrientes generalmente son diferentes en primavera-verano comparado con otoño-invierno, lo que provoca que la erosión de la orilla de Ondarreta sea mucho mayor cuando el mar está en calma (aunque parezca mentira), por eso se produce en verano ese talud pronunciado o gran escalón en el límite superior de las mareas. Gran parte de esa arena es arrastrada hacia el sector occidental de la playa de la Concha y hacia el centro de la Bahía por las corrientes marinas. Eso es un efecto inevitable, por mucho que se viertan capas de arena en la orilla, antes o después, y generalmente en pocos días o semanas, la acción del mar retira esa capa de arena sobrante de la orilla y la playa adquiere el perfil que de manera natural le corresponde.

Los técnicos de Azti conocen que ese proceso se produce sobre todo a partir de la segunda quincena de mayo (aunque no es una regla matemática, depende siempre del estado de la mar) y dura prácticamente todo el verano, e intentan adelantarse a la dinámica natural de la arena antes de que afloren los escombros, pero fracasan todos los años desde que comenzaron con esta acción en 2012.

El intentar vaticinar de que manera se van a comportar el oleaje y las corrientes marinas desde ahora hasta finales de verano resulta precipitado, y como en predicciones de años anteriores condenado al fracaso, en todo caso habría que consultar a "las témporas", porque más importante que las marejadas que se hayan producido o no durante el invierno es conocer el estado de la mar para los próximos meses, lo que provocará que afloren más o menos escombros.

"Durante la primavera-verano ocurre el movimiento contrario: se registra un traslado continuo de arena desde la parte baja a la superior que genera una pendiente más acusada que en invierno."
"... y en verano las mareas al trasladar arena de la orilla a la parte superior las descubrirán a las primeras de cambio."

Si la fuerza de la mar en primavera-verano es menor que en otoño invierno, ¿alguien podría explicar como es posible que el mar capture arena en la orilla de Ondarreta y la traslade a la zona alta de la playa "cuando nadie le ve", y que además la deposite sorteando las carpas, toldos, sombrillas, juegos infantiles, bares, usuarios de la playa...?, ¿no será el viento?, un elemento fundamental en el transporte de la arena, y en la creación de dunas, que no se menciona en ninguno de los informes redactados por Azti...

"Ondarreta tiene un gran volumen de piedras bajo la arena con un origen que aún se discute. Por ello, a esta playa le sientan mejor los inviernos potentes que los suaves."

El volumen de escombros bajo la arena de Ondarreta es grande, no existe ninguna duda, pero tampoco existe discusión alguna sobre el origen antrópico de los mismos, y los escombros son basura pétrea que conviene retirar por motivos de salubridad ambiental, tal y como se hace con los plásticos y basura en general. Además, las ramas arrastradas por las riadas y las algas con un origen evidentemente natural también se retiran, para preservar el uso lúdico de esta playa.

La dinámica de la arena es un proceso natural perpetuo, pero antes de la construcción del campo de maniobras en los arenales de Ondarreta los cascotes no afloraban porque no estaban presentes, al ser entonces una playa natural limpia de escombros.

"Azti ultima en estas semanas un extenso estudio realizado en los últimos meses sobre las características, volumen de arena, piedras, y topografía del conjunto de la bahía (playas de La Concha y Ondarreta)."
"..., se ha hecho un estudio de la batimetría o forma que tiene el fondo marino, y también se ha caracterizado la arena (granulometría)."

Este estudio patrocinado por el Ayuntamiento de Donostia ya se realizó hace más de una década, en concreto su referencia bibliográfica es la siguiente:

URIARTE, A.; GALPARSORO, I.; GONZÁLEZ, M.; GYSSELS, P.; LIRIA, P.; CASTRO, R. & SANTIAGO, Z. 2004. Estudio de la evolución a corto, medio y largo plazo de la playa de Ondarreta (Donostia-San Sebastián) y diseño óptimo de conservación. Fundación Azti para Ayuntamiento de Donostia-San Sebastián. Pasaia, 2004.

Al parecer Azti lo ha rescatado de los archivos municipales para completar su próximo informe, así como el siguiente informe sufragado por Costas:

CEDEX. 2012. Seguimiento de las playas de La Concha y de Ondarreta (San Sebastián) octubre 2010-2011. Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas. Informe Técnico para el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Secretaría de Estado de Medio Ambiente. Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar. Madrid, 2012.

"Estos trabajos se unen a los análisis que se realizan con las cámaras instaladas en el Monte Igeldo y que monitorizan los movimientos de arena a lo largo de todo el año y se complementan con las mediciones topografías que realiza el Ayuntamiento cada mes y que entrega a Azti para que lo incorpore a sus análisis."

Las mediciones topogtáficas no las realiza el Ayuntamiento, las realiza con periodicidad mensual el Servicio de Costas de Gipuzkoa desde 1986.

En los datos de las variaciones de los volúmenes de arena de las playas de Ondarreta y de La Concha desde 1986 hasta 2003, tomados por el Servicio de Costas de Gipuzkoa, se observó que los valores medidos oscilaban alrededor de un valor medio y que no había pérdidas o incrementos de arena apreciables. Las mediciones se realizan desde entonces con periodicidad mensual. En 2010-2012, el CEDEX ha realizado un seguimiento de la arena en las playas de La Concha y de Ondarreta encargado por el mismo Servicio.

"..., una de las conclusiones que anunciará este estudio es que se ha detectado un mayor volumen de piedras bajo la playa de Ondarreta del barajado en los estudios que se han elaborado en los últimos años por el Servicio de Costas o el Cedex (entre 5.600 y 6.750 m3)."

Esta conclusión corrobora lo afirmado por Aranzadi que las piedras no forman parte del sustrato rocoso natural de la playa, que evidentemente tendría su final en el núcleo del planeta tierra, y que determinar el volumen de piedras con un origen natural presentes bajo la playa de Ondarreta sería tarea imposible. Con esta afirmación implícitamente se reconoce que la estima volumétrica corresponde a los cascotes, escombros o piedras molestas presentes en Ondarreta.

El Servicio de Costas de Gipuzkoa realizó en noviembre de 2011 un informe en el que recomendaba la retirada de escombros del arenal donostiarra. Se llegó a esta conclusión tras realizar en agosto del mismo año 23 catas de 120 centímetros de profundidad. De estos trabajos se pudo derivar que en la playa hay un volumen aproximado de 6.750 m3 de cascotes de origen antrópico que se han de retirar.



Según el informe de Costas, la mayor cantidad de piedras no es de "origen natural", sino fruto de la incidencia del hombre durante siglos en esa zona: "Solo una mínima porción del material pedregoso, el de menor tamaño, se podría considerar como de origen natural como base de la desembocadura del arroyo de los Juncales -regata de Konporta- que en su día alcanzaba el mar atravesando el arenal. El resto del volumen de piedra presente en la playa de Ondarreta se estima que se trata de material aportado por el hombre a lo largo de la evolución del barrio de El Antiguo y por el mar debido a la rotura de acantilados cercanos".

Los muros de la antigua cárcel, el desvío del colector de la regata del Konporta, el ferrocarril que pasaba por la playa y la cantera de cal. Estas y otras actuaciones antrópicas provocaron la presencia de cascotes en Ondarreta. "Las piedras no son cantos rodados de origen natural en su mayoría, aunque la mayor parte de los escombros están redondeados debido al tiempo que llevan sometidos a la acción del oleaje, asunto que ha hecho dudar sobre su origen en previsiones anteriores", indica el informe y recomienda, tras la retirada de los obstáculos que secuestran la arena en la parte alta de la playa, sacar "fuera del sistema las piedras de origen antrópico".

Estos trabajos solo deben acometerse en el caso de que las piedras hayan vuelto a aparecer. "Si no es así, habrá que esperar hasta que esto ocurra", afirma el texto. El presupuesto para acometer estas actuaciones asciende a 159.400 euros.


A raiz de este informe, Azti comenzó a plantearse recomendar al Ayuntamiento la retirada de escombros de Ondarreta.



Al parecer, Azti ha podido utilizar en 2015 métodos geofísicos para calcular el volumen de cascotes, metodología que podría ser, según el calibrado que le corresponda, mas o menos eficiente que el tradicional empleado por el Servicio de Costas.

En definitiva, buenos veranos en el último cuatrienio para Azti:





Puntualizaciones técnicas a las referencias realizadas sobre el estudio de Sociedad de Ciencias Aranzadi (2013):

En primer lugar, agradecer al autor del artículo Aingeru Mungía por mencionar el estudio de Aranzadi y demostrar una vez más su gran profesionalidad.

El artículo menciona lo siguiente:

Un estudio de la Sociedad de Ciencias Aranzadi indicó en 2013 que el 95% son restos de construcciones de los últimos 140 años (cárcel, campo militar de maniobras, etc) y que, por tanto, pueden ser retirados sin afectar al sustrato rocoso natural de la playa.

El informe de Aranzadi indica lo siguiente:

Las conclusiones generales determinan que, tras el análisis de campo de los materiales, se estima que la casi totalidad de la masa de piedras molestas que afloran en el arenal de Ondarreta tienen un origen antrópico, y que en realidad se tratan de escombros generados por actividades humanas realizadas en el entorno sobre todo en los últimos 140 años. El resto, una ínfima fracción residual se podría corresponder con pequeñas piedras desprendidas y proyectadas de manera natural por la erosión del oleaje sobre los acantilados, las rocas sumergidas y la rasa intermareal.

Aproximadamente el 90-95% de los escombros son consecuencia de una actividad concreta; el campo de maniobras para la instrucción del ejército que se instaló en Ondarreta en 1872. La explanada también se utilizó como pista de atletismo, aeródromo, hipódromo, campo hípico y campo de fútbol. El 5-10% de las agresiones restantes es de origen diverso, como los intentos de construcción del dique semisumergido “El Pasillo” en la entrada oeste de la Bahía (1821), la cantera de Arbizketa o Arrobi que ocupaba toda la ladera bajo Torre Satrustegi (<1569-1887), la cantera de Arroka-Aundi en lo que hoy es la plaza del Funicular (1881), el colector de la regata Konporta “La Alcantarilla” (1915), paseo de los jardines y paseo del Tenis (1925)…, incluso una vía férrea estrecha (0,8 m) atravesaba el arenal para trasladar materiales primero hasta la fábrica de botellas de Brunet, para elevar un poco el nivel de la parcela (1876), y más tarde hasta la c/ Matia, y en épocas más recientes los cascotes sobrantes de la demolición de la plataforma ilegal de la cafetería de Ondarreta (1994), derrumbe de la rampa del Tenis (2009), y piedras sin cribar del aparcamiento de la plaza de Cervantes (2010).

El intentar determinar por medio de una estima porcentual la cantidad de escombros respecto a las piedras naturales presentes en Ondarreta resulta complicado, pero en todo caso las piedras molestas son independientes de la rasa mareal o flysch occidental y pueden catalogarse como "cascotes o escombros puros", con una estima cercana al 100%.

La presencia de piedras en las capas de arena de superficie, aunque tuviesen un origen natural, serían posteriores a la formación de la playa, por lo que no formarían parte del sustrato rocoso natural de la playa y su retirada no comprometería la estabilidad de la propia playa. La retirada de las piedras antrópicas enterradas de ningún modo podría conllevar el arrastre de la arena, con la consiguiente pérdida de material en dicha zona.

lunes, 16 de marzo de 2015

Origen piedras y restauración de Ondarreta

Investigación y redacción:
Jon Etxezarreta Iturriza. Biólogo. Aranzadi Zientzia Elkartea.

Asesoramiento científico:
Dr. Eneko Iriarte Avilés. Geólogo. Universidad de Burgos.
Dr. Alejandro Cearreta Bilbao. Geólogo. Facultad de Ciencia y Tecnología de la UPV/EHU. Ambos miembros de Aranzadi Zientzia Elkartea y de GEO-Q, Centro Mixto de Investigación UPV/EHU-ARANZADI sobre Geología del Cuaternario. Leioa (Bizkaia).

La aparición de piedras molestas en la playa de Ondarreta es un fenómeno cíclico, principalmente estival, con reaparición periódica anual en las últimas décadas. Esta situación está generando incomodidades e incluso problemas de salud por lesiones a los usuarios de la playa, que en masa se desplazan al extremo oriental para bañarse, y está causando un perjuicio al turismo al rebajar la calidad medio ambiental de la playa de Ondarreta (Figura 1). Por el contrario, la rasa mareal o formación geológica denominada flysch de Ondarreta, con sus acantilados y rocas naturales asociadas, es un fenómeno geológico singular de la Bahía de La Concha a conservar (Lugar de Interés Geológico “LIG 89” y dotado de “Especial Protección Estricta” en el Plan Territorial Sectorial de Protección y Ordenación del Litoral Vasco) que suma un atractivo más a esta playa.

Desde hace una década, el Ayuntamiento de Donostia-San Sebastián y el Servicio Provincial de Costas de Gipuzkoa, como principales gestores de las playas donostiarras, así como diversas entidades interesadas públicas o privadas, realizan estudios para preservar el uso lúdico de la playa de Ondarreta y reducir el problema de la aparición de las piedras durante el verano.

En los últimos 125 años, para la conservación de sus playas se ha pretendido estudiar la topografía y la batimetría, y se han lanzado propuestas con escaso acierto para controlar de manera permanente la dinámica de la arena de las playas.

El estudio del origen de las piedras molestas presentes en la playa de Ondarreta y la evolución del arenal, es imprescindible para comprender la raíz del problema y proponer soluciones prácticas dirigidas a una correcta gestión. Factores como la historia contemporánea de San Sebastián, la regata del Gorga que desembocaba en el extremo occidental, las extracciones de arena, tierra y piedras desde la playa, y las diversas construcciones que ocupaban la playa son aspectos fundamentales para comprender la verdadera problemática de la playa.

Ante el inicio inminente de la Segunda Guerra Carlista, y la necesidad de instrucción de las tropas, en 1872 se instaló un nuevo campo de maniobras en los arenales de Ondarreta. Estas obras consistieron en la construcción de un muro de contención en fábrica de piedra (mampostería), delimitando, hacia el mar, la superficie del campo de maniobras que fue explanado con aporte de arena, tierra y cascotes (cota de +4,5-5 m), y se extendía por los actuales jardines y gran parte de la playa de Ondarreta (1,6 ha). A partir de 1888 en la zona occidental albergó la cárcel que se finalizó de desmantelar en 1949.

En el análisis de las series de imágenes históricas del campo de maniobras de Ondarreta, se observan los repetidos destrozos, con arrastre hacia la orilla de cascotes y posteriores reparaciones del muro de costa (Figura 2). Lo mismo se desprende de los materiales examinados, en la parte baja del perfil (orilla) las piedras afloran entre las cotas +1 m y +2 m, y desde principios del verano de 2012 en la parte alta del perfil los cascotes con mayor tamaño medio y con cantos menos erosionados afloran entre las cotas +3 m y +4 m. La práctica totalidad se corresponden con elementos de construcción antiguos, aunque los más pequeños por su erosión podrían ser confundidos con cantos rodados o lajas desgastadas de una caliza margosa de origen natural, pero que en muchos casos conservan incluso restos de masa o mortero adheridos. El cemento que se aprecia corresponde con el tipo Portland en algunos de los cascotes (como los ladrillos), que pudieron ser utilizados en arreglos del murallón, pero sobre todo se aprecian incrustaciones de cal hidráulica en varios materiales de mampostería. La clave estaría en la presencia de incrustaciones de mortero, en concreto de cal hidráulica empleada en construcciones en la segunda mitad del siglo XlX, en aquellas piedras con cantos rodados que se asemejan a naturales, y también de piezas de mampostería con marcas de haber sido canteadas o esculpidas por canteros. Los cascotes o escombros del antiguo muro de costa y del relleno para la explanación del campo de maniobras, arrastrados por el movimiento de la arena durante años se desplazan lentamente desde la zona alta de la playa hasta la orilla, donde sufren la erosión de las corrientes y del oleaje hasta convertirse en cantos rodados.

Las cotas en las que aparecen las piedras molestas (escombros), cotas entre +1 m y +4 m, son muy superiores a las que corresponderían a la base de gravas de la playa (cota <0 m), por lo que difícilmente podrían provenir de su removilización.

La presencia de piedras en las capas de arena de superficie, aunque tuviesen un origen natural, serían posteriores a la formación de la playa, por lo que no formarían parte del sustrato rocoso de la playa y su retirada no comprometería la estabilidad de la propia playa. La retirada de las piedras enterradas de ningún modo podría conllevar el arrastre de la arena con la consiguiente pérdida de material en dicha zona.

Con la aparición de las primeras piedras el proceso de erosión de la playa se acelera de manera exponencial, cuantas más piedras afloran más turbulencias o torbellinos se producen y mayor volumen de arena es arrastrado por la bajada de la ola al interior de la Bahía, hasta que las corrientes determinadas y el oleaje con tendencia a la sedimentación de la arena revierten el proceso volviendo a cubrir las piedras.

La presencia del relleno sedimentario estuarino está confirmada, y la hipótesis de que las piedras de la playa pudieran haber sido arrastradas a través de la marisma por el Gorga (Konporta), y que sirve a su vez como medio poroso para el desagüe de escorrentía por la parte occidental de la playa queda descartada, porque las piedras presentes en la playa nunca atravesaron el estuario. Las excavaciones de las plantas de garaje de la zona de Ondarreta y Benta Berri confirman que bajo una capa superior de fango de un metro de espesor sólo existe arena sin piedras.

Tras 140 años de agresiones las autoridades apenas se han preocupado de retirar los cascotes de esta playa marginal. Un problema similar existió en el sector suroccidental de la playa de La Concha en la segunda mitad el siglo XlX. El problema se solucionó construyendo muros de contención y retirando las piedras con miles de carretadas.

La presencia de un manto protector de arena disipa la energía de los temporales del Cantábrico. La retirada de arena de la zona alta de la playa para tapar las piedras de la orilla, rebajando la barrera de protección actual, podría comprometer la estabilidad del paseo de los jardines (cota +5 m), diseñado a cota de 7 m inferior al paseo de La Concha (cota +12 m), y afectar a las instalaciones fijas como paseo, cabinas, escaleras y rampas de acceso.

Para poder interpretar la dinámica natural de la masa de arena en la bahía de La Concha se tendría que realizar un seguimiento a largo plazo. Los estudios enfocados a analizar exclusivamente la topografía y la batimetría, así como el movimiento o distribución de la arena con medidas de los niveles, parten con conclusiones preconcebidas, donde la supuesta falta de arena dejaría al descubierto un lecho de piedras considerado natural, “la base de gravas de la playa”, para lo que se proponen medidas provisionales como realizar aportes de arena para cubrir de manera temporal las piedras. Pero el problema no es la distribución de la arena, el problema son los escombros que antes o después siempre afloran, al ser elementos extraños que ocupan un lugar que no les corresponde en este enclave. En definitiva, la playa tiene un exceso de acumulación de escombros que por medios naturales es incapaz de asimilar.

Las conclusiones generales determinan que, tras el análisis de campo de los materiales, se estima que la casi totalidad de la masa de piedras molestas que afloran en el arenal de Ondarreta tienen un origen antrópico, y que en realidad se tratan de escombros generados por actividades humanas realizadas en el entorno sobre todo en los últimos 140 años. El resto, una ínfima fracción residual se podría corresponder con pequeñas piedras desprendidas y proyectadas de manera natural por la erosión del oleaje sobre los acantilados, las rocas sumergidas y la rasa intermareal.

Aproximadamente el 90-95% de los escombros son consecuencia de una actividad concreta; el campo de maniobras para la instrucción del ejército que se instaló en Ondarreta en 1872. La explanada también se utilizó como pista de atletismo, aeródromo, hipódromo, campo hípico y campo de fútbol. El 5-10% de las agresiones restantes es de origen diverso, como los intentos de construcción del dique semisumergido “El Pasillo” en la entrada oeste de la Bahía (1821), la cantera de Arbizketa o Arrobi que ocupaba toda la ladera bajo Torre Satrustegi (<1569-1887), la cantera de Arroka-Aundi en lo que hoy es la plaza del Funicular (1881), el colector de la regata Konporta “La Alcantarilla” (1915), paseo de los jardines y paseo del Tenis (1925)…, incluso una vía férrea estrecha (0,8 m) atravesaba el arenal para trasladar materiales primero hasta la fábrica de botellas de Brunet, para elevar un poco el nivel de la parcela (1876), y más tarde hasta la c/ Matia, y en épocas más recientes los cascotes sobrantes de la demolición de la plataforma ilegal de la cafetería de Ondarreta (1994), derrumbe de la rampa del Tenis (2009), y piedras sin cribar del aparcamiento de la plaza de Cervantes (2010).

La alternativa ideal para eliminar la totalidad de los escombros y solucionar para siempre el problema, implicaría movilizar unos 120.000 m3 de materiales (arena y piedras), para mediante cribado extraer y retirar todas las piedras a la escombrera o reciclarlas en la construcción, pero su elevado coste sería complicado de asimilar en la actualidad para las administraciones implicadas.

La Propuesta de Actuación, respetuosa con el medio ambiente y ajustada a los recursos económicos actuales, propone la retirada paulatina y repetida en el tiempo, mecánica o manual, de todas las piedras molestas que afloren integrada en el propio servicio de mantenimiento de la playa, a diario tanto en invierno como en verano, cuando el nivel de la marea lo permita.

En el mercado existe maquinaria agrícola, las despedregadoras (Figura 3), aperos acoplables a los tractores del servicio de limpieza de playas que podrían facilitar dicha labor superficial de cribado. La tarea habría que prolongarla de manera intensiva durante un período inicial de 3-5 años, para asegurar la retirada de la mayor parte de los escombros que afloran. Una vez realizada esta limpia se debería reperfilar la playa por empuje de la arena mediante máquinas topadoras (bulldozers), asemejando un perfil natural suave y de carácter disipativo, con suave pendiente continua desde la cota +4 m cercana al paseo (cota +5 m) hasta el límite inferior de la orilla con marea equinoccial de 0.00 m. Con esta acción de remover horizontes profundos es probable que aparecieran nuevas piedras (cascotes), que permanecen sepultadas en la zona alta de la playa bajo la capa superior de la arena, y que por supuesto también convendría retirar. Tras eliminar las piedras que afloren en la playa, habría que permitir que la dinámica natural de la playa siguiera su curso. El objetivo principal de la restauración sería restablecer los procesos y funciones ecológicas de la playa de Ondarreta, de tal manera que permitan el mantenimiento de un ecosistema autosuficiente integrado en el territorio.


55ª Reunión del Consejo Asesor de Medio Ambiente de San Sebastián

Ante la insistencia de Aranzadi para solucionar definitivamente el problema, entre el 5 y 6 de junio una máquina despedregadora realizó una prueba de su efectividad retirando piedras en la playa de Ondarreta.

En la 55ª Reunión del Consejo Asesor de Medio Ambiente, celebrada el 17 de julio, el representante de Aranzadi manifiestó que la situación de la playa de la Concha en el verano de 2013 era excelente mientras que la de Ondarreta era penosa dado que aquellos residuos que se encuentran sobre lo que son cascotes, y que fueron confundidos en los informes de Azti Tecnalia con el sustrato rocoso natural, no se recogen debido a que las máquinas no están preparadas para ello y que tampoco se recogen a mano. Por otro lado, y en relación a los escombros de la playa, expresó su malestar y preguntó al Ayuntamiento por qué razón éstos no se recogen, ya que la máquina despedregadora que se probó demostró ser una herramienta excelente y retiró unos 135 m3 de piedras en siete horas de trabajo, lo que por desgracia representa sólo el 2% de los 6.750 m3 de piedras antrópicas presentes en la playa estimado por el Servicio de Costas.


ONDARRETA HONDARTZAKO HARRI KALTEGARRIEN JATORRIA ETA BERRESKURATZE NATURALAREN PROPOSAMENA

Egilea: Jon Etxezarreta Iturriza
Aholkulari taldea: Alejandro Cearreta eta Eneko Iriarte

Ondarretako hondartzan kaltegarriak diren harrien urteroko agerpena duen fenomeno ziklikoa da. Honek biztanleen ondoeza eta itsasoratzeko ekialderuntz toki-aldaketa behartzen du, osasun-arazoak eta turismoari kalte eraginez, eta Ondarreta hondartzako ingurumen kalitatea jaitsiz (1. irudia).  Bestalde marearteko zabalgunea edo flysch fenomeno geologikoa Kontxako badiaren mendebaldeko muturrean aurkitzen den erakarpen berezia delarik (Garrantzi Geologiko Gunea “GGG 89” eta Euskadiko Itsasertza Babestu eta Antolatzeko Lurraldearen Arloko PlaneanBabes Zorrotz Berezia”-rekin izendatua).

Azken hamarkadan, Donostiako Udala eta Gipuzkoako Kostaseko Zerbitzua, donostiako hondartzen kudeatzaile nagusiak izanik, bai eta interesaturik dauden zenbait erakunde publiko edo pribatuak, Ondarretako erabilera ludikoa babesteko eta udaran zehar harrien agerrera murrizteko ikerketak burutzen dituzte.

Azken 125 urteetan, hondartzen kontserbaziorako topografia eta batimetria aztertzen saiatu dira, eta hondartzetako harearen dinamika betirako kontrolatzeko arrakasta gutxirekin proposamenak egin dira.

Ondarretako hondartzan agertzen diren harri horien jatorria eta harearen garapena nolakoa izan den jakitea ezinbestekoa da, arazoaren muina zein den ulertzeko eta kudeaketa egoki batetarako irtenbide praktikoak proposatzeko. Hala nola, Donostiako azken bi mendeetako historia, mendebaldeko muturrean itsasoratzen zen Gorga erreka, hondartzatik ateratako harea, lurra eta harriak, eta hondartzan zeuden hainbat eraikinak nolakoak ziren ezagutzea funtsezko faktoreak dira hondartzako benetako arazoak ulertzeko.

Bigarren Karlista Guda hasteko prest zegoenean, eta gudariak prestatzeko beharraren aurrean, 1872an maniobra zelai berri bat eraiki zen Ondarretako hondartzan. Itsasora begira mugatuta zegoen prestakuntza zelaia eusteko, harrizko (harlangaitz) horma baten eraikuntza egin zen. Harea, lurra eta harriz eginiko betelana jarri zen (+4,5-5 m-ko kota), eta lorturiko lautada gaur egungo Ondarretako lorategi eta hondartzako zati handi batetik zabaltzen zen (1,6 ha). 1888 urtea geroztik mendebaldeko zonaldean kartzela egon zen eta honen suntsiketa 1954an amaitu zen.

Ondarretako maniobra zelaiko irudi historikoen azterketan behin eta berriz errepikatzen diren suntsiketak nabarmentzen dira, eraikin harriak itsasoak berak eramaten zituen eta ondoren itsas hormaren konponketak egiten zirela ikus daiteke (2. irudia). Gauza berbera gertatzen da azterturiko materialetan, beheko profilan harriak +1 m eta +2 m koten artean azaleratzen dira, eta 2012ko udararen hasieratik goi profilan erdi-tamaina handieneko eta ertzetako higadura gutxieneko eraikin harriak +3 m eta +4 m koten artean agertzen dira. Guztiak antzinako eraikin elementuei dagozkio, nahiz eta txikienak bere higadura dela eta kareharri tuparritsu natural baten harri-borobildu edo lauza baten itxura izan, baina kasu askotan ere masa edo morteroa erantsita mantentzen da. Antzematen den zementua Portland tankerakoa da eraikin harri batzuetan (adreiluetan adibidez), hormaren konponketarako erabiliak izan zitezkeenak, baina gehienbat kare hidraulikoaren tuparritsuak nabarmentzen dira hainbat harlangaitz materialetan. Gakoa mortero tuparritsuen presentzian legoke, zehazki naturalak diruditen harri-borobilduetan XlX. mendearen bigarren zatian erabiltzen zen kare hidraulikoaren agerpena, eta baita ere harlangaitzeko elementuetan harginek egindako taila markak aurkitzea. Itsas-horma zaharreko eta maniobra zelaiaren lautada egiteko bete lanen hartxintxarrak edo obra-hondakinak, harearen mugimenduen eraginez urtetan zehar poliki-poliki hondartzaren goialdetik itsasertzera mugitzen dira, bertan korronte eta olatuen higadura jasaten duten harri borobilduetan bihurtu arte.

Harri gogaikarriak (hondakin-harriak) agertzen diren kotak, +1 m eta +4 m arteko kotak, hondartzako legarren oinarriari dagokionari baino askoz ere handiagoa da, eta beraz, zaila da bertatik eratorria izatea.

Azaleko geruzetan azaltzen diren harriak, nahiz eta gutxi batzuk jatorri naturala izan, hondartzaren eraketaren ondorengoak dira, beraz, ezinezko da oinarriaren zati edo hondartzaren jatorrizko egitura izatea eta kentzeak ez luke hondatuko hondartza beraren egonkortasuna. Lurperatuak dauden harriak kentzeak, inolaz ere ez luke hondarraren arrasteari eragingo eta ondorioz eremu horretan ez luke materialaren galera ekarriko.

Lehenengo harrien agerpenarekin hondartzaren higadura prozesua esponentzialki bizkortzen da. Zenbat eta harri gehiago agertu, gero eta turbulentzia edo zurrunbilo indartsuagoak gertatzen dira, eta hondar-bolumen handiagoa arrastatu egiten da. Badiaren barnealdera olatuaren jaitsieraren eraginez korronte zehatzak eta sedimentazio joera duten uhinek prozesua itzuli egiten dute, berriro ere harriak estaliz.

Estuarioko betelan sedimentarioren presentzia baieztatua dago, eta Gorga (Konporta) erreka zehar harrien arrastea gertatu izana eta ur isurketarako hondartzaren mendebaldetik ingurune porotsua delakoaren hipotesia erabat baztertzen da, hondartzan agertzen diren harriak inolaz ere ez zutelako estuarioa zeharkatu. Ondarreta eta Benta Berri eremuko garaje solairuen hondeaketak 1 metroko lohi goi-geruza baten azpitik harri gabeko harea zegoen eta.

140 urteetan zehar erasoak jasan ondoren agintariek ozta-ozta arduratu dira hondartza marjinal honetatik hondakin-harriak kentzen. XlX. mendeko bigarren erdialdean Kontxa hondartzako hego mendebaldeak antzeko arazoa izan zuen. Gaitza euste-hormak eraikiaz eta harriak milaka gurdien bitartez kentzen konpondu zen. Hondar babes-geruzaren presentziak Kantauriko ekaitzen energia desagerrarazi egiten du. Hondartzaren goi-aldetik itsasertzeko harriak estaltzeko hondarra kentzeak, lorategien pasealekuaren (+5 m-ko kota) egonkortasuna arriskuan jarri dezake, Kontxako pasealekuarekin konparatua (+12 m-ko kota) 7 m-ko behe-mailako kotan diseinatua dagoelako, eta pasealekua, kabinak, eskailera eta arrapala bezalako eraikuntza egonkorretan eragina izan dezake. 

Kontxako badian harea-masaren dinamika naturala interpretatu ahal izateko, epe-luzean egin beharko litzateke jarraipena. Topografia eta batimetria, edo harearen banaketa mailen neurketen bidez aztertzen diren ikerketak, jatorriz kutsatuak dauden ondorioekin hasten dira eta, non ustezko hondar gabeziak naturaltzat hartzen den harri-geruza agerian utziko luke, “hondartzako oinarri-legarrak”, eta epe motzerako hondarraren bitartez harriak estaltzea behin-behineko irtenbide neurriak proposatzen dira.

Ondorio orokorrak zehaztu ondoren, eta materialen mendi-azterketa egin ondoren, Ondarretako hondartzan agertzen diren harri gogaikarrien masa kontutan harturik ia bere osotasunean jatorri antropogenikoa dutela, eta benetan, batez ere azken 140 urteotan ingurunean giza jarduerak zirela eta sortuak izan direla estimatzen da. Gainerakoa, oso hondar-frakzio txiki bat itsaslabarrak, murgildutako arrokak eta marearteko zabalgunearen aurka olatuen higadurari esker modu naturalean askatu eta jaurtiriko harri txikiak izan daitezke.
Gutxi gorabehera, hondakin-harrien %90-95a jarduera jakin baten emaitza da; 1872an Ondarretan armadaren prestakuntzarako eraiki zen maniobra zelaia. Lautada hau atletismo pista, aerodromoa, hipodromoa, zelai-hipika eta futbol zelaia ere izan zen. Gainerako erasoak, %5-10a, jatorri ezberdinetakoak dira, esate baterako Badiaren mendebaldeko sarreran erdi murgilduriko kai-muturra “Korridorea” egiteko ahaleginak (1821), Satrustegi Dorrearen azpiko magalean aurkitzen zen Arbizketako harrobia (<1569-1887), gaur egun Funikularraren plaza aurkitzen den Arroka-Aundiko harrobia (1881), Konportako errekaren kolektorea “Estolda” (1915), lorategietako pasealekua eta Teniseko pasealekua (1925)…, tren-bide estu bat barne (0,8 m) hondartza zeharkatzen zuen, lehendabizi Brunet botila lantegiaren lur-maila igotzeko materialak garraiatzen zituen (1876), gero Matia kaleraino, eta Ondarreta kafetegiko legez kanpoko plataformaren eraispenaren txintxor soberakinak (1994), Teniseko arrapalaren suntsiketa (2009), eta Cervantes plazako aparkalekuaren bahetu gabeko harriak (2010).



Hondakin-harri guztiak kendu eta arazoa betirako konpontzeko aukerarik hoberena, 120.000 m3 material (harea eta harriak) mugitzea suposatuko luke, bahetik pasatuz harriak atera eta hondakindegira baztertzeko edo eraikuntzan birziklatzeko, baina gaur egungo egoeran izango lukeen kostu altua inplikaturiko administrazioak jasateko eragozpenak egon daitezke.


Proposamen Ekintza, ingurumenarekin bat datorrena eta gaur egungo baliabideetara egokitua dena, agertzen diren harri kaltegarri guztiak pixkanaka eta denboran zehar errepikapen faseetan ateratzea proposatzen da, mekanikoa edo eskuzkoa izan daiteke, hondartzako garbiketa zerbitzuan integratua, egunero eta neguan nahiz udaran, marea-maila ahalbidetzen den arabera.

Merkatuan harriak ezabatzen dituzten baserriko ekipoak aurki daitezke (3. irudia), hondartzako garbiketa zerbitzuan erabiltzen diren traktoreei egokitu daitezke eta gainazaleko bahetze lan hau erraztuko lukete. Zeregin hau era trinkoan 3-5 urteko epean luzatu beharko litzateke agertzen diren hondakin-harri gehienak kendu direla ziurtatzeko. Garbiketa hau egin ondoren hondartza berriro ere profilatu egin beharko litzateke talka-makinen bidez (bulldozer-ak), naturala dirudien profil leuna eta xahutzaile baten bitartez, etengabeko malda leun batekin, +4 m-ko kota batetik pasealekutik gertu (+5 m-ko kota) itsasaldi ekinozioan itsasertzeko 0.00 m-ko behe-mugaraino egoteko. Sakoneko mugak iraultzearen akzio honekin harri berri gehiago (txintxorrak) agertzea gerta daiteke, berauek jarraitzen baitute estaliak hondartzako goi-eremuan, zehazki harearen goi-geruzaren azpian, eta hauek ere kentzea komeniko litzateke. Hondartzan azalera harriak kendu ondoren, hondartzako dinamika naturala aurrera jarraitzeko aukera dago. Zaharberritze honen helburu nagusia, Ondarretako hondartzan prozesu eta funtzio ekologikoa berreskuratzea izango litzateke, eta, beraz, lurraldean bere kabuz iraunkorra izan daitekeen ekosistema bat mantentzea da.


Donostiako Ingurumenaren Aholku Kontseiluaren 55. bilera

Behin betirako arazoa konpontzeko eta Aranzadik proposaturikoarekin bat eginez, ekainak 5 eta 6an harriak kentzeko makina berezi baten egokitasuna frogatu zen Ondarretako hondartzan.

Uztailak 17an eginiko Donostiako Ingurumenaren Aholku Kontseiluaren 55. Bileran, Aranzadiko ordezkariak agertu zuen 2013ko udaran Kontxako hondartzaren egoera ezin hobea zela baina Ondarretarena berriz penagarria zela, Azti Tecnalia-ko txostenetan substratu arrokatsu naturalarekin nahastu ziren txintorren gainean dauden hondakinak ez baitira jasotzen, makinak ez daudenez horretarako prestaturik eta eskuz erez ez dira jasotzen. Bestalde, eta hondartzako obra-hondakinei dagokionez, bere haserrea adierazi zuen eta Udalari zergatik ez ote dira biltzen galdetu zion. Gogorarazten du, harriak kentzeko probatu zen makina sekulako tresna zela frogatu zuen eta zazpi lan ordutan 135 m3 harri kendu zituela, baina hori zoritxarrez Kostaseko Zerbitzuak estimatu zituen 6.750 m3 harri antropikoetatik bakarrik %2-a dela.

FIGURAS/IRUDIAK

Figura 1. Estado de la playa de Ondarreta en verano.
1. Irudia. Ondarretako hondartzaren egoera udaran.


Figura 2. Destrozos visibles en el muro y el terraplenado del campo de maniobras.
2. Irudia. Maniobra zelaiko harrizko horman eta ezpondan kalte nabariak.
Autor: Gregorio González Galarza. © de la fotografía Museo San Telmo.

Figura 3. Despedregadora en Ondarreta.
3. Irudia. Harriak kentzeko makina Ondarretan.